No siempre tenemos a esas personas en nuestro día a día, pero los viejos amigos son quienes nos recuerdan todas las versiones que hemos sido. Ellos sostienen pedacitos de nuestra historia y, a veces, nos ayudan a ver cómo hemos evolucionado cuando nosotras mismas no lo notamos.
Esta respiración es un espacio para agradecerles —para enviarles energía, paz y un buen día, estén donde estén.
Si quieres recibir audios como este cada semana directo en tu correo, suscríbete en unrespiroalavez.com.
Y si quieres profundizar en tu práctica y conectar conmigo para sesiones privadas de breathwork, encuéntrame en Instagram como @andrea.sofia.alemany.